MG sigue a paso firme en la conquista del mundo SUV

La firma del grupo Saic relanzó hace algunas semanas el HS, el cuarto integrante de su familia de SUV en Chile -integrada ya por el ZS, el RX5 y el ZS EV-, que muestra una mayor madurez como producto en todos los aspectos, aunque su objetivo final es conquistar a un público joven más exigente a través de la experiencia de conducción. ¿Lo logrará? Aquí el resultado.

MG debe ser de las pocas marcas que a pesar del complejo año que ha vivido la industria automotriz puede sacar cuentas alegres. Partió el 2020 recibiendo el reconocimiento a Mejor Marca, premio otorgado por la prensa especializada; luego vino la puesta en venta del ZS EV, el primer SUV eléctrico de la marca, el lanzamiento del MG 5, meterse entre las 10 firmas más vendidas del mercado nacional y logró posicionar también a su sport utility de entrada ZS en el top 10 de ventas del segmento SUV.

Para coronar la primera mitad del año, la llegada del HS un SUV del segmento C, que si bien se posiciona por encima del RX5 por tamaño y precio, busca captar la mirada de un público más joven y exigente.

Y para conseguir ese objetivo, lo primero es la imagen. Con un diseño notoriamente heredado del MG 6, el HS es por lejos uno de los modelos más modernos de la marca, que con su largo capó le da una impronta deportiva, la que se mezcla bastante bien con los predominantes pasos de ruedas, viéndose todo con una gran armonía. En el frontal destaca su parrilla estrellada y los focos que la firma denomina London Eye. Diseño con identidad y proporcionado, que se ve bien y es coherente con lo que ofrece.

Espacio y estilo. En MG diseñaron el habitáculo del HS para entregar el mayor confort sin sacrificar elegancia, lo que se puede apreciar en la elección de los materiales de contacto, los plásticos intermedios, además de su amplio sunroof.

El interior también juega un rol importante. Una atmósfera elegante, pero moderna, donde predomina su pantalla flotante digital y táctil de 10,1'', con buena luminosidad y gráfica moderna. Para qué hablar de los materiales empleados y las cuidadosas terminaciones que tiene en cada rincón, con casi ningún lugar olvidado de los detalles, lo mejor que ha mostrado la marca en los modelos que han llegado al mercado local. Además, la versión Trophy que probamos viene con detalles especiales, como las costuras en color rojos en los asientos, en algunas partes del panel y la palanca de cuero, que le otorgan un look más deportivo y juvenil. La tecnología está a flor de piel en el HS, conectividad para Android Auto y Apple CarPlay, y una larga lista de etcéteras que puede leer en la versión extendida de este test.

Lo mismo ocurre con la seguridad, pues esta variante viene con seis airbags, frenos ABS y control de tracción, de frenado en curva, de estabilidad, de arranque en pendiente y, otra vez, una larga lista de etc. Además, agrega el sistema MG Pilot, que suma asistencias a la conducción como los de tráfico cruzado, de punto ciego, entre otros.

El sistema MG Pilot, que suma asistencias a la conducción como los de tráfico cruzado, de punto ciego, entre otros.

Pero el MG HS no sólo se queda con el envoltorio para garantizar una buena impresión y en cada nuevo producto hay más trabajo para garantizar mejores sensaciones tras el volante. En este caso, un motor 2.0 de 226 Hp asociado a una transmisión automática de doble embrague y seis velocidades. Un buen bloque, muy pujante, pero que sí tiene un microturbo lag. Obviamente, los más de 200 caballos se sienten y le permiten moverse con soltura en todo el régimen del tacómetro. Los pasos de marcha casi no se sienten, tiene una dirección directa sobre todo a mayor velocidad y la suspensión es correcta. Sí destaco sus cuatro modos de conducción: Normal, Eco, Sport y Super Sport. Espacio y estilo.

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